Webfic
Open the Webfic App to read more wonderful content

Capítulo 1

Después de cinco años de matrimonio y tras haber intentado la fecundación in vitro noventa y nueve veces, Ángela Díaz finalmente quedó embarazada. Llevaba en la mano el informe del examen y regresó a casa para compartir su alegría con Rubén García, pero, al acercarse, escuchó las voces burlonas de él y su amigo. —Le he estado ocultando tres cosas a Ángela. —Primero, falsifiqué su informe de infertilidad y la engañé para que se sometiera a noventa y nueve tratamientos de fecundación. —Segundo, el hijo que lleva en el vientre es de José García; no tiene nada que ver conmigo. —Tercero, la mujer a quien siempre he amado es Susana Díaz. Ángela sintió que caía en un abismo, pero las voces dentro del despacho seguían resonando. —En la cena de nuestro quinto aniversario, dentro de una semana, el abuelo anunciará que heredaré los negocios de la familia. En ese momento, haré que todos sepan que Ángela y ese bastardo, José, mantienen una relación impropia. Ángela temblaba de rabia. Apretó con fuerza el informe de embarazo hasta arrugarlo y desbloqueó el número de José. [José, quiero hablar contigo sobre un gran negocio]. ... Dentro del despacho estallaban risas. —Ya lo decía yo, Rubén odiaba tanto a Ángela... ¿Cómo iba a decidirse de pronto a dejarla embarazada? ¡Resulta que el hijo es de otro hombre! —Por un momento casi creí que te habías enamorado de Ángela. Rubén giró la cara, con una expresión profunda y una sonrisa sarcástica. —¿Amor? Apenas si me alcanza el tiempo para odiarla. Si no fuera por aquella relación accidental hace cinco años, jamás me habría casado con ella. —De ahora en adelante no digan esas cosas. Si Susana se entera, no se los perdonaré. Cada palabra se clavaba como un puñal en el corazón de Ángela. Sentía el cuerpo entumecido, como si estuviera encerrada en una cámara de hielo. Cinco años atrás, el día después de que su madre, Leticia, muriera al caer de un edificio, su padre, Juan, no tardó en llevar a casa a su amante y a su hija ilegítima. Ángela intentó impedirlo sin éxito y, desesperada, fue a un bar a emborracharse. Jamás imaginó que alguien la drogaría y, confundida, terminaría teniendo relaciones con Rubén. A la mañana siguiente, la hija ilegítima de Juan, Susana, irrumpió en la habitación con una amiga. Todos sabían que Ángela había estado enamorada de Rubén durante años, pero ella no pudo explicar lo sucedido. Finalmente, fue el abuelo Mateo quien decidió que Rubén y Ángela debían casarse. Por aquel entonces, José, quien había vivido fuera, acababa de ser aceptado nuevamente en la casa de los García. Rubén, decidido a obtener poder, no se atrevió a oponerse a la decisión del abuelo. Para Ángela, el matrimonio también parecía la mejor solución. Así, los dos se casaron, tal y como se había dicho. Durante cinco años, Rubén mantuvo la misma frialdad hacia ella; sólo la buscaba por las noches para hacer el amor. Ángela creía que él también la amaba, que algún día lograría ablandar su corazón. Jamás imaginó que la mujer a la que él amaba era Susana. Aquel "accidente" de hace cinco años también había sido una trampa planeada por Rubén. Con tal de obtener la herencia, él había maquinado todo para que Ángela quedara embarazada de José. El dolor de Ángela era tan intenso que apenas podía respirar; temblaba sin control. Podía aceptar que Rubén no la amara, pero no que la hubiera torturado con tratamientos de fertilización falsos. ¡Rubén, qué cruel! De pronto, alguien en el despacho dijo: —Rubén, asegúrate de que Ángela no sepa que el niño que espera es de José; no vaya a ser que se unan contra ti. —¡Ja! —Rubén soltó una risa desdeñosa—. Ángela es demasiado orgullosa; desprecia a los hijos ilegítimos. De no ser así, no estaría siempre enfrentándose a Susana. En otras palabras, incluso si Ángela descubría la verdad, jamás se aliaría con José. De inmediato, en el despacho estallaron los aplausos. —¡Excelente estrategia! Esa jugada tiene múltiples beneficios; ni aunque hubiera diez Ángelas podrían resistirse. —¿Por qué esperar una semana? ¡Ya quiero ver cómo termina esta historia! Ángela apretó los labios, conteniendo a duras penas las lágrimas. Desde los dieciséis años había estado enamorada de Rubén; ya habían pasado diez años. Pensó que, después de tantas dificultades, por fin llegaría la felicidad... Pero todo era una farsa. Clavó las uñas en la palma de su mano, con los ojos llenos de un odio profundo. ¿Rendirse? ¡Ni en sueños! ¿Rubén creía tener la victoria asegurada? Ella le daría una lección. Le demostraría que engañarla tenía un precio. Al final, quien riera último sería el verdadero vencedor.
Previous Chapter
1/27Next Chapter

© Webfic, All rights reserved

DIANZHONG TECHNOLOGY SINGAPORE PTE. LTD.