Capítulo 28

“No me disgustas. Entiendo lo que me pides, pero no sé cuánto tiempo podré seguir esperando. Nuestros lobos se necesitan el uno al otro, necesitan estar conectados. De lo contrario, mi lobo enloquecerá y tal vez incluso yo enloquezca. No quiero que eso suceda.” “¿Entonces lo harías a la fuerza? ¿Me arrebatarías algo tan preciado porque nuestros lobos se necesitan? ¿Porque te falté al respeto sin siquiera saberlo? ¡No es justo!” Se queda en silencio durante un largo rato y yo cierro los ojos a pesar de que no estoy cansada. Si lo miro en este momento, me rendiré ante él y no puedo permitirlo. No quiero aceptar su marca hasta que me demuestre que él también me quiere y no solo su lobo. “Entiendo.” Abro los ojos de golpe ante su repentina respuesta. “¿Qué quieres decir?” “Que entiendo, no… no te marcaré como castigo. Si te pone tan nerviosa, podemos esperar. Haré lo mejor que pueda, pero no siempre podré controlar a mi lobo, él quiere lo que quiere y eso eres tú.” Asiento