Capítulo 65

Federico no tenía idea de lo que estaba pasando, y su expresión se ablandó. —Josefina, no es que... —¿Así que todo este tiempo estuviste molesta por eso? Su expresión tensa se relajó bastante. Josefina soltó una risa fría. —Federico, ahora no quiero verte, y por favor, no vengas a arrastrarme contigo, ¿de acuerdo? Dicho esto, dio unos pasos hacia el edificio de oficinas del Grupo Estrella. Federico la siguió. Al entrar Josefina al vestíbulo, la recepcionista se acercó de inmediato. —Señora Josefina, el señor Salvador me pidió que la acompañara arriba. Josefina asintió con la cabeza. Federico se apresuró a alcanzarla, caminando junto a ella. —Josefina, dejemos de lado nuestros problemas por un momento. Te acompaño. Josefina se detuvo y lo miró de reojo. No esperaba que, después de haber humillado tanto a Federico, él aún así la siguiera. A él ya no parecía importarle el orgullo en ese momento. La recepcionista, que había notado la tensión entre ambos, dijo en voz baja: —Señora Josefina,