Capítulo 23

No tuve más remedio que aceptar su petición. Me había cambiado el maxivestido por un traje, con una camisa abotonada de manga larga, una chaqueta y unos pantalones que me llegaban por debajo de los tobillos. Aunque sinceramente hubiera preferido acudir con un traje de protección si tuviera uno. Leon Ferguson parecía agradable en un principio. Habló de trabajo, y se mostró entusiasmado ante la perspectiva de trabajar con Candour, incluso comprometiéndose a firmar una carta de intenciones ese mismo día. Pero reveló sus verdaderas intenciones cuando sus manos, que se mantuvieron quietas durante los primeros quince minutos, se deslizaron lentamente hacia mí. Incluso bebió una botella entera de Chateau La Mission Haut-Brion, solo para poder echarle la culpa al alcohol más tarde. Luego se despojó de su chaqueta Tom Ford y dejó de fingir. Mientras tanto, traté de mostrarme indiferente en todo momento. Normalmente, no me importaría rebajarme a hacer el ridículo si con ello conseguía lo que que