Capítulo 23

Nancy la miró con frialdad, sin moverse. Julia se acercó a ella, fingiendo cariño, intentando meterle el vaso de agua en la mano. Pero, torció el pie, exclamó sorprendida y se lanzó sobre Nancy. ¡El agua hirviendo iba a derramarse! Ella reaccionó rápido, se giró para esquivarla, y con un giro de su muñeca, atrapó la mano de Julia y la empujó hacia afuera. El vaso de agua caliente se derramó sobre la muñeca de Julia. —¡Ah! Un grito desgarrador rompió la tranquilidad de la oficina. Nancy se sintió divertida. Con tan pocas habilidades, todavía podía presumir frente a ella. Se llevó una mano para acomodarse su cabello detrás de su oreja y sonrió mientras decía: —Señorita, más vale que tengas cuidado. La delicada piel blanca del dorso de la mano de Julia se tornó roja, a punto de ampollarse. —¡Lo hiciste a propósito! José, con los ojos llenos de rabia, sin pensarlo, la empujó a un lado. Nancy no esperaba que él viniera, entonces la fuerza fue tan grande que no pudo mantenerse y retrocedió t