Capítulo 166
Fausto respondió con una sonrisa radiante y dio unas palmadas en el asiento a su lado.—Ven siéntate conmigo.
David lo miró con una profunda frialdad en sus ojos almendrados que parecía capaz de congelarlo como una estatua de hielo.
Viviana sonrió y lo rechazó con amabilidad. —Estoy bien de pie.
—El estar de pie es muy agotador, siéntate.—Fausto volvió a hacerle señas.
—Ok.
Viviana no tuvo más remedio que aceptar el ofrecimiento.
Por supuesto, no se sentó junto a Fausto, sino que eligió un lugar cerca de David.
Fausto cruzó tranquilo las piernas, recostado en la silla, con una actitud tan relajada que transmitía a la vez una sensación de desfachatez y falta de seriedad.
La miraba sonriendo, como si estuviera interesado en ella.—No sé por qué, secretaria Viviana, pero mientras más te miro, más simpática me pareces. ¿Qué te parece si te reconozco como mi hermanita?
Viviana enmudeció.
¿Y si mejor te reconozco como mi abuelita, qué tal?
Pensó para sus adentros, pero también consideró que ll

Locked chapters
Download the Webfic App to unlock even more exciting content
Turn on the phone camera to scan directly, or copy the link and open it in your mobile browser
Click to copy link