Capítulo 89

—Lo sé, Eric. No te preocupes, no voy a ir muy lejos. Lo más lejos que llegaré será a las colinas a admirar un poco el paisaje. Desde aquí todo se ve muy bonito, por tanto, allá arriba la vista debe ser aún mejor —dije por enésima vez mientras él me miraba con una expresión muy rara en el rostro—. De acuerdo, no voy a ir a las colinas ni hacer puentismo. No voy a rastrear la montaña ni mucho menos saltar desde allí. ¿Estás contento? —exclamé molesta. —Sí, mejor así. Ya me voy, te llamo cuando llegue y te cuento cómo está todo por allá —dijo Eric y luego asintió con la cabeza por última vez y salió de mi habitación. —Genial. Ahora solo quedamos tú y yo —le dije a Ariana, que había estado muy callada desde el día anterior. Después de comer las pizzas, Eric llamó a Mark para decirle que estábamos en la zona y, para nuestra sorpresa, lo primero que este le dijo fue que no me llevara a la Cámara del Consejo. Si no hubiera escuchado la conversación, habría creído que Mark sentía vergüenza de