Capítulo 1336

Laura lo encontraba un poco increíble. En realidad, no sentía ninguna vergüenza de que Lorena la hubiera visto así. Su dignidad la había perdido hacía mucho tiempo y no había forma de recuperarla, así que no tenía nada de qué avergonzarse. —Señorita Laura, dígame lo que sepa. Yo puedo permitirle que mate a Luis con sus propias manos. La comisura de los labios de Laura se curvó una vez más. —La verdad es que no tengo mucha información. Al fin y al cabo, Luis y Marcos, para prevenirme, me tienen encerrada aquí. Las personas que vienen a verme todos los días son siempre las mismas. Yo no soy más que una herramienta para que él satisfaga sus necesidades físicas. No dice cosas importantes frente a mí. Lo único que hago es sacar conclusiones de lo poco que dice. Ahora que usted ha provocado tal caos en la familia López, la información que debía saberse ya se sabe. Lorena tomó la mano de Laura y le prometió con solemnidad: —Voy a venir a sacarte de aquí. Laura lo encontró gracioso y, mientras