Capítulo 322

Lorena se quedó atónita, de repente recordó que cada vez que tenía relaciones sexuales con Ignacio era muy intenso, y después siempre tomaba pastillas en secreto, así que no podía estar embarazada. Bajó las pestañas y esbozó una leve sonrisa: —Es imposible, usamos métodos anticonceptivos. Que hablara de ese tema con tanta franqueza demostraba que realmente no sentía nada por Yago. Los dedos de Yago, colgando a su costado, se encogieron ligeramente, luego sacó un cheque por setecientos mil dólares. —Anoche Patricia fue quien tomó la iniciativa de confesarle todo a Pedro. Este cheque te lo envía Pedro, además te consiguió un especialista extranjero. Esas marcas de látigo no dejarán cicatrices. ¿Quieres ir al hospital? Lorena miró el cheque delante de ella y en su mente podía imaginarse la expresión totalmente serena de Pedro. Le habían dado una paliza con el látigo, así que no iba a rechazar ese dinero. Guardó el cheque y esbozó una sonrisa: —Dale las gracias de mi parte al jefe Pedro. Y