Capítulo 914

—Samuel, ¿dónde estabas anoche? Te llamé muchas veces, pero tu celular estaba apagado. ¿Estabas con la señorita Camila? Al escuchar su nombre, Camila palideció de inmediato. Sentía que en este momento era como una relación que no podía ver la luz del sol. Samuel observó con detenimiento la expresión en el rostro de Camila. —¿Tienes algo que decirme? Inés, ansiosa, le dijo: —Samuel, despierta de una vez por todas, esa señorita Camila es una seductora, solo quiere atraparte. Camila no supo qué responder. ¿De verdad estaba bien que dijera eso de ella? Además, ella no había seducido a Samuel. Fue Samuel quien la había forzado. Camila alzó con rabia la cabeza y le lanzó a Samuel una mirada furiosa. Samuel la miró divertido. Camila acababa de despertar. Su largo cabello caía con dulzura y belleza, y solo llevaba una pequeña camiseta de tirantes. Una gran parte de su piel blanca quedaba al descubierto. Ella levantó su carita, y esos ojos llenos de lágrimas lo fulminaron con la mirada, denunci