Capítulo 100
Debido a este asunto, la imagen de Adolfo ante sus colegas y subordinados se volvió objeto de críticas, y en menos de dos días, perdió varios acuerdos de colaboración.
Así que él volcó toda su ira sobre Viviana, y los dos cónyuges tuvieron una pelea feroz. Los sirvientes de la villa escuchaban atentos, sin dejar pasar ni un solo chisme.
Dejando escapar un "esperen y verán", Adolfo salió dando un portazo, lleno de rabia.
En el dormitorio principal, Viviana, después de recibir dos bofetadas, se tapaba la cara hinchada y lloraba en silencio.
Amelia, que no era la primera vez que presenciaba las peleas de sus padres, pero nunca intervenía, se acercó sigilosamente a la habitación de Viviana después de que Adolfo se fuera y le entregó un paquete de pañuelos.
—Mamá, deja de llorar. Los sirvientes están afuera esperando a ver el espectáculo. Tus lágrimas solo les darán material para chismes y conversación.
Aunque Amelia despreciaba profundamente la infidelidad de Adolfo,
También le causaba muc

Locked chapters
Download the Webfic App to unlock even more exciting content
Turn on the phone camera to scan directly, or copy the link and open it in your mobile browser
Click to copy link