Capítulo 81

—El señor Antonio acaba de anotarse una victoria delante del señor Sergio. ¿Acaso no le gustaría recuperar un poco de orgullo? Sergio detectó de inmediato la maniobra de Amelia ¿De verdad esta mujer intentaba usarlo como herramienta para enfrentar a Antonio? Aunque a él le desagradaba, no era tan ingenuo como para dejarse manipular por alguien más. —Si la señorita Amelia teme que el saldo de su tarjeta no sea suficiente, puedo prestarle el monto con un interés del 1 % sobre el capital, por un plazo de tres días. Si no se realiza el pago al finalizar ese periodo, el interés subirá al 2 %. Amelia se sentía humillada. Había pensado que, incluso si Sergio no la reconocía como su pareja oficial, al menos en términos económicos no sería tan calculador con ella, y mucho menos si Antonio estaba de por medio. Cuando vio que Clara volvía a presionar el botón de la subasta en nombre de Antonio, Amelia ya no pudo contenerse. Ignoró por completo el estado de su tarjeta y se negó a retroceder. ¡Tení