Capítulo 63

Hace más de sesenta años, la familia Flores no era más que una familia común y corriente de la capital, y Nicolás no era más que un simple interno en un hospital. En aquel entonces, el hospital recibió a un paciente con un edema pulmonar agudo. Justo era domingo, y en el departamento solo trabajaban dos internos, uno de ellos era precisamente Nicolás. Al enterarse de que aquel paciente era el dirigente de la familia Fuentes, el otro interno se echó a temblar de miedo y lo único que hizo fue llamar corriendo al director del hospital. Solo Nicolás, al ver que la situación del hombre no era para nada alentadora, lo subió directo a la mesa de operaciones. Cuando el director llegó, Nicolás ya había logrado salvar la vida del dirigente de la familia Fuentes. Desde entonces, en el equipo médico privado de la familia Fuentes apareció la imponente figura de Nicolás. Y gracias a aquella situación, la familia Flores pudo expandirse y en apenas unas décadas se convirtió en una familia aristocrátic