Capítulo 57
—Hola, señorita Lourdes, realmente ha pasado mucho tiempo.
Natalia fue la primera en acercarse, extendiendo la mano con elegancia.
Lourdes mostró una expresión algo rígida, dudó un momento antes de estrechársela.
—Hace mucho que no te veía.
—¿Y esa cara? Pareces como si te hubieras comido un limón.
Gabriela, al notar su expresión, comentó sin rodeos.
Al ver que Lourdes se sentía un poco incómoda, Natalia se dirigió alegremente hacia Roberto.
—Roberto está aquí.
Al escuchar ese nombre, el semblante de Lourdes se mostró confundido.
Ella también solía llamarlo así.
—No te quedes ahí parada, entren todos.
Gabriela ya había llegado a la puerta del salón privado y les hizo señas para que pasaran.
El salón era amplio. Lourdes, al entrar, vio de inmediato a su hija.
—Alicia, mamá ya llegó.
Al oír su voz, Alicia corrió emocionada: —¡Mamá, mamá, te extrañé mucho!
—Soy tu tía, ¿te acuerdas de mí?
Gabriela, al ver a Alicia, pareció tomarle mucho cariño y la interceptó a mitad del camino.
—No, tú n

Locked chapters
Download the Webfic App to unlock even more exciting content
Turn on the phone camera to scan directly, or copy the link and open it in your mobile browser
Click to copy link