Capítulo 161 Miedo de hacerle daño

Manuel aún quería utilizar el matrimonio de su hija con otra persona para obtener de esta forma beneficios, por eso necesitaba valerse de su madre para atarla emocionalmente, y por lo tanto no se divorciaría con facilidad. —Y aunque se divorciara, tu padre no nos dejaría en paz a las dos...—dijo Isabel con los ojos enrojecidos y la voz temblorosa.—A veces, de verdad, quisiera acabar con todo esto, así no te arrastraría conmigo a la desgracia. Pero soy demasiado cobarde, no tengo el valor suficiente para morir. Perdóname, hija, por haberte causado tantos problemas. Mónica miraba a su madre, dolida al verla tan triste y deshecha. —Moni, de ahora en adelante, ya no te preocupes por mí. No importa en qué estado termine, aunque me golpee hasta dejarme irreconocible, no intervengas en esto. Así él no podrá chantajearte para obligarte a hacer cosas que no deseas. Isabel le tomó la mano y bajó la voz, temiendo en ese momento que Manuel la oyera. —Mamá, ¿cómo esperas que no me importe?—respondi