Capítulo 170 En verdad no puedo

Ella estaba tan enojada que le picaban los puños. Tomó un cojín cercano y lo utilizó como si fuera Pablo, golpeándolo con fuerza varias veces. —¡Él te engañó y aún quiere casarse contigo! Quiere todo, es un tipo repugnante.—Dijo, claramente haciendo mala cara indignada. —Moni, debiste haber llamado al jefe Sergio antes de ir. Si no lo hubieras hecho, como dijiste, si el presidente Sergio no llega a tiempo, ¿de verdad te ibas a casar con Pablo? Mónica mordió sus labios y, mirando hacia abajo, le susurró: —No, pero el día de hoy Manuel y Pablo utilizaron a mi madre para presionarme. En apariencia, solo puedo seguirles el juego, pero en privado no será posible. Manuel no podrá culparme. Julia se sorprendió por un momento.—¿Ya habías pensado en una manera de responder? —Solo tengo algunos planes. Mi idea era lidiar con lo del día de hoy, y luego, en privado, hacer que el abuelo Diego se enterara del engaño de Pablo. Con la amistad entre el abuelo Diego y mi abuelo, él seguro no me dejaría