Capítulo 1599

Después de colgar el teléfono, Pablo se dio cuenta de que Ana aún no se había ido. Probablemente había escuchado su entretenida conversación con Haila. De todos modos, ya no importaba no había nada que ocultar. Enseguida le sonrió a Ana y dijo: —Estaba hablando con Haila, ella sospecha que Ignacio está saliendo con una compañera de la secundaria. Me pidió que investigara un poco al respecto. Ana sonrió con agrado: —Sí, lo escuché. Ya que se canceló la cita, ¿por qué no comemos juntos? Hacía mucho tiempo que no tenía contacto con Haila e Ignacio. La vida de todos había cambiado recientemente. Todo parecía encaminarse poco a poco en una dirección positiva. —¡Genial! Justo me cancelaron y estaba pensando en qué pedir a domicilio; ya estoy harto de la comida a domicilio, siento que he probado todo lo que hay por aquí cerca. Pablo no exageraba. A veces, tenía que quedarse a trabajar hasta tarde en la oficina, aprendiendo cosas nuevas, y solía pedir comida a domicilio. Conocía bien lo bueno