Capítulo 105

Enrique arrojó los documentos que tenía en la mano sobre la mesa y dijo: “Corrígelos. Sal del trabajo después de terminarlos”. Guillermo miró los documentos y descubrió que había muchos comentarios y notas en ellos. Suspiró en su corazón: "Efectivamente, cuando mi hermano está de mal humor, es más exigente y riguroso con su trabajo". Parecía que había una especie de radar mágico en el cuerpo de Enrique. Cuanto más deprimido estuviera, más fuerte sería su capacidad de trabajo. Incluso si a veces Guillermo se equivocaba en la puntuación, ¡no podía ocultárselo a Enrique! Si tuviera que hacer todos los cambios en los documentos, tal vez podría salir del trabajo hasta mañana por la mañana. Con un suspiro, Guillermo recogió los documentos y miró a Steve. Ambos vieron desesperación en los ojos del otro. Pasó toda la noche. Cuando llegó la mañana, Guillermo se levantó de la silla. Los dos se quedaron dormidos en medio de la noche anterior. Beber Red Bull fue inútil. Finalmente se quedaron dorm