Capítulo 68

—Devuélvemelo —Andrea tenía el rostro frío y estiró la mano para arrebatárselo directamente. Pero no esperaba que, al segundo siguiente, Julia se lo pusiera rápidamente en su propio dedo. Sus dedos no eran tan delgados como los de Andrea, y el anillo se atascó a la mitad. La expresión de Julia cambió ligeramente, y luego, con fuerza, se lo empujó hasta el fondo. Cuando terminó todo, levantó la barbilla y le sonrió con suficiencia a la mujer frente a ella. —Andrea, este anillo de diamantes era tu anillo de compromiso, ¿cierto? ¿Qué se supone que haga? Es que me gustaba mucho —La vocecita encantadora salió de la boca de Julia, y en su expresión hacia Andrea había pura satisfacción y arrogancia. Salvador no estaba presente, solo estaban las dos mujeres. Y había cosas que Julia ya no se molestaba en fingir. Andrea apretó fuertemente los labios, con una ira contenida que le hervía en el fondo de los ojos. —Andrea, ¿por qué me miras así? —Julia se tapó los labios y soltó una risita coqueta,