Capítulo 1181

¡Qué despiadadamente codicioso! ¡Se había quedado prácticamente sin nada! Sin embargo, Wilbur no pudo resistir la tentación del viejo dragón. Supuso que nadie podría resistirse a ello. Wilbur suspiró y optó por intercambiar el Trébol. El Trébol irradiaba una tenue luz azul mientras flotaba. Wilbur lo sostuvo y lo observó detenidamente durante un rato. La calidad de la recompensa que producía el viejo dragón era innegable. Por lo tanto, decidió ingerirlo tras una breve deliberación. Una vez decidido, se sentó con las piernas cruzadas en el demiplano y empezó a digerir el Trébol. Mientras tanto, un anciano, un hombre con estilo y un hombre musculoso estaban sentados en un despacho del último piso. Estaban en el edificio de la Cámara de Comercio Kiwanis de la Ciudad Mágica. El hombre con estilo seguía jugando a su videojuego mientras el hombre musculoso estaba sentado ansiosamente. El anciano los miró y dijo lentamente: "El asesinato volvió a fallar". "No creo que deba