Capítulo 73

—Quédese tranquilo. Mientras colabore con la Compañía Viento del Este, la Compañía Viento del Este no lo decepcionará. Salvador solo le lanzó una mirada y no dijo nada más. Se dirigió hacia la salida del callejón. Orlando seguía esperando en el mismo lugar. Al ver salir a Salvador, se apresuró a bajar del auto y abrir la puerta trasera. Federico acompañó a Salvador hasta el vehículo. Al notar que su auto no obstruía el paso del de Salvador, se extrañó un poco. —Señor Salvador... Salvador respondió con un semblante sereno y tranquilo: —Parece que el auto que bloqueaba mi camino no era el suyo, Señor Federico. Me equivoqué. Orlando alzó una ceja. Había estado esperando todo el tiempo dentro del auto y no había visto que ningún otro vehículo les bloqueara el paso. Federico tampoco tuvo nada que responder, así que contestó con cortesía: —No hay problema. Salvador no mostró ni el más mínimo atisbo de vergüenza y se agachó para subir de nuevo. Federico observó cómo el automóvil de Salvador s