Capítulo 13

Quizás fue el fin de los exámenes de ingreso, pero mi tensión desapareció. Aquella noche, empecé a sufrir una fiebre alta. No me recuperé por completo hasta la víspera del día en que recibí la carta de admisión. La noche en que se publicaron los resultados, consulté mi puntaje en línea. El puntaje perfecto era catorce, y yo obtuve trece. Este resultado fue tres puntos por encima del mínimo requerido para ingresar a la Universidad San Fernando. Estaba muy satisfecho con este logro. Tras varios días acosado por pesadillas, finalmente fui envuelto en sueños placenteros. Al día siguiente, me levanté temprano para prepararme e ir a la escuela. Después de los exámenes, Nuria había sido llevada por sus padres de vacaciones al extranjero. No nos vimos hasta más de diez días después, en la entrada de la escuela. Nuria se había cortado su largo cabello y lo había teñido de marrón; además, como ya se había graduado, llevaba una bonita falda de colegiala y parecía una hermosa joven de un cómic, co