Capítulo 143 Pedir su ayuda, aún no era digna
Angélica regresó a su habitación cuando Rosa la llamó.
—¿Qué tal, le hablaste a Martín?
Angélica se tiró en la cama y miró el techo blanco. —Las palabras estaban en la punta de mi lengua, pero me las tragué.
—¿Por qué?
Rosa no entendía y dijo: —Lo veo claro, Martín siente algo especial por ti. ¿Por qué no lo intentas?
—Aunque sea especial, es solo un poco de afecto. Una negociación involucra a ambas partes. ¿Con qué le pagaría si le pidiera ayuda? ¿Ofreciéndome a mí misma? Conozco mi lugar y él tampoco me casaría. Si se lo pido y me rechaza, sería demasiado embarazoso para mí.
Angélica se dio vuelta en la cama y se rió de sí misma. —Pedir su ayuda, aún no era digna.
Rosa suspiró, pero aun así le aconsejó: —Si no le preguntas, ¿cómo sabrás si está dispuesto o no, Angélica? ¿Realmente planeas casarte con ese mal hombre, Daniel?
Por supuesto que no quería, pero tampoco podía pedirle ayuda a Martín.
Esa noche, Angélica no durmió hasta el amanecer.
...
Angélica estaba or

คลิกเพื่อคัดลอกลิงก์
ดาวน์โหลดแอป Webfic เพื่อปลดล็อกเนื้อหาที่น่าสนใจเพิ่มเติม
เปิดกล้องโทรศัพท์เพื่อสแกน หรือคัดลอกลิงก์แล้วเปิดในเบราว์เซอร์ของคุณ
เปิดกล้องโทรศัพท์เพื่อสแกน หรือคัดลอกลิงก์แล้วเปิดในเบราว์เซอร์ของคุณ