Capítulo 22

Hasta el final de la exposición, él no logró intercambiar ni una sola palabra con Daniela. Justo cuando se disponía a salir tras ella, su celular sonó de repente. Al ver en la pantalla la palabra "padre", Jorge finalmente decidió contestar la llamada. Ninguno de los dos, ni Alberto ni Jorge, habló primero; ambos permanecieron escuchando en silencio la respiración del otro al teléfono. Al final, fue Alberto quien rompió el silencio: —El tiempo se está acabando. ¿Aún no quieres regresar? La relación entre Jorge y Alberto nunca había sido cercana. Sumado a la escasa compañía paterna durante su infancia, entre ambos apenas existían temas de conversación. Además, Alberto era un hombre severo, poco dispuesto a comunicarse con su hijo. Con los años, la distancia y los malentendidos entre padre e hijo solo se acrecentaron. Ahora, escuchar a Alberto preguntarle algo de forma tan directa resultaba insólito. Jorge guardó silencio por un largo rato antes de responder: —Volveré, pero primero quiero