Capítulo 12

La empleada habló con ambigüedad, solo dijo que era algo muy importante y que no podía explicarlo por teléfono. Alejandro no tuvo más opción que levantarse y bajar las escaleras. Al pasar por el área del personal, escuchó a algunos empleados conversando. —¿Saben que ese mujeriego de Joaquín, de la familia Delgado, se va a casar? —Sí, sí, lo sé. ¡Ay, qué tristeza! Joaquín era el príncipe azul de miles de chicas, tan guapo… ¿Cómo es que ya se va a casar? —Escuché que se casaron porque ya tenían un bebé, ¡ella incluso llegó con un hijo de seis meses! —¡Ah, con razón! Se rumora que al señor Arturo le encantan los niños... Hablando de eso, ¿no tiene también el señor Alejandro un hijo que ya casi cumple seis meses? ¿Por qué nunca lo hemos visto? —¿Quién sabe...? Y nadie se atreve a preguntar. Estos últimos meses, el señor Alejandro ha estado de muy mal humor. Después de desahogarse, al ver que Alejandro pasaba cerca, todos se callaron de inmediato, asustados. Alejandro no tenía tiempo para p