Capítulo 183
—No pienses que no sé lo que estás tramando. Te lo digo, solo reconozco a Lourdes como mi nuera. Ocúpate de esa Belén que tienes a tu lado, tengo mil maneras de tratar con ella.
—¡Entonces inténtalo!
Un intenso aroma de confrontación se esparce por el aire...
Sin embargo, en ese momento, un sirviente entra y reporta: —Señora Alicia, señor Oscar, la señorita Leticia ha venido a ver al señor Oscar.
Alicia responde: —Tiene el descaro de venir a Casa Díaz, dile que se vaya.
El sirviente, con dificultad, dice: —La señorita Leticia insiste en que no se irá hasta ver al señor Oscar.
Alicia ordena: —Entonces que espere.
Leticia está de pie fuera de las cerradas puertas del gran patio, soportando el sol abrasador. No sabe cuánto tiempo ha estado allí, sus labios están agrietados y su rostro pálido la hace tambalearse.
Justo cuando ve a alguien salir, es Ángeles, el sirviente que ha servido a Alicia durante muchos años.
—El señor Oscar no te verá, más te vale que te vayas. Hoy

คลิกเพื่อคัดลอกลิงก์
ดาวน์โหลดแอป Webfic เพื่อปลดล็อกเนื้อหาที่น่าสนใจเพิ่มเติม
เปิดกล้องโทรศัพท์เพื่อสแกน หรือคัดลอกลิงก์แล้วเปิดในเบราว์เซอร์ของคุณ
เปิดกล้องโทรศัพท์เพื่อสแกน หรือคัดลอกลิงก์แล้วเปิดในเบราว์เซอร์ของคุณ