Capítulo 19
Pero Sergio había dedicado más de tres meses a diseñar y fabricar el bolso, siguiendo tutoriales en línea y adquiriendo materiales y herramientas a través de su maestro.
No esperaba que a ella realmente le gustara, solo deseaba que lo mantuviera a su lado, incluso si lo tiraba en un rincón como basura; estaría contento.
Carmen, pálida, mostró sin embargo una suave sonrisa: —Debería agradecerte, el bolso es muy bonito y el color combina bien, me gusta mucho.
—Vamos, busquemos un lugar para sentarnos y charlar con una copa.
Ya estaba considerando retirarse y dejar el lugar.
No esperaba que Sergio, siendo tan introvertido, estuviera dispuesto a venir a un evento como este por ella.
¿Cómo podría dejarlo solo?
Ambos entraron al interior de la villa y encontraron un sofá en un rincón tranquilo donde sentarse.
Aunque Sergio era tímido y no muy conversador, Carmen y él compartían la misma profesión y estaban a punto de colaborar, por lo que naturalmente tenían mucho de qué habl

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