Capítulo 954
Mario casi se desmayó.
—¡Absurdo! ¡Esto es absurdo!
Como patriarca Mario de la familia Guzmán, jamás había sido desafiado de esa manera.
La persona arrodillada en el suelo estaba completamente desconcertada, esperando su orden.
Mario destrozó una taza de café, respiró hondo y cerró los ojos. —Vete por ahora.
Cuando esa persona se marchó, el patriarca Mario se llevó la mano a la frente y, por más que pensó, no pudo averiguar la identidad de aquella mujer con la máscara de gata.
Mario salió, subió al auto y lo condujo hasta un lugar oculto. Tras golpear la puerta varias veces, entró.
Relató lo ocurrido con Ariel, poniendo especial énfasis en esa mujer enmascarada con máscara de gata.
Mario se arrodilló en el suelo. —Si me libras de esa mujer, de ahora en adelante estaré a tu servicio para siempre.
El hombre estaba sentado en la silla, con una mano apoyada con indiferencia en la mejilla.
Mario no se atrevió a alzar la vista hacia él; se golpeó la frente contra el suelo varias veces. —¿Jef

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