Capítulo 165
Raquel frotó sus ojos somnolientos. —Quiero dormir un poco más.
—¿Dormir? ¡Vamos, despierta! Ven, te llevaré a un bar a divertirte.
Camila volvió a arrastrar a Raquel hacia el bar, y pronto llegaron al lujoso reservado, donde encontraron a varios conocidos: Ana, Carlos, Elena y algunos hijos de empresarios.
Carlos estaba sentado en el sofá y preguntó: —Anita, Alberto ya lleva dos días de viaje de negocios, ¿no vuelve hoy?
Después de esa noche, Alberto se había ido de viaje, y Raquel no lo había vuelto a ver ni había tenido contacto con él.
De acuerdo con lo pactado, después de esa noche, no se debían nada.
Sin embargo, su secreto compartido había aumentado.
Ana sonrió ligeramente. —Sí, Alberto vuelve esta noche.
—Ana, ¿sabías que el presidente Alberto hace unos días condujo su auto por la autopista a toda velocidad, como si estuviera en una carrera? Lo pillaron con las cámaras electrónicas y le quitaron tres puntos. ¿Lo sabías?
Ana se quedó sorprendida; no tenía idea de ese

คลิกเพื่อคัดลอกลิงก์
ดาวน์โหลดแอป Webfic เพื่อปลดล็อกเนื้อหาที่น่าสนใจเพิ่มเติม
เปิดกล้องโทรศัพท์เพื่อสแกน หรือคัดลอกลิงก์แล้วเปิดในเบราว์เซอร์ของคุณ
เปิดกล้องโทรศัพท์เพื่อสแกน หรือคัดลอกลิงก์แล้วเปิดในเบราว์เซอร์ของคุณ