Capítulo 347
Vicente temía que su hermana mayor no pudiera soportar semejante golpe, así que no tenía intención de decirle la verdad. Sin embargo, Lourdes lo conocía demasiado bien y exclamó de inmediato: —¡No pienses en engañarme!
—¡Habla, puedo soportarlo!
Lourdes apretó con fuerza las sábanas que tenía a su lado. Sus ojos, desenfocados, brillaban con una mezcla de tenacidad y un odio implacable. —Cuando encontremos al culpable, ¡voy a matarlo con mis propias manos!
Vicente reflexionó un momento antes de responder lentamente: —Aún no hemos encontrado al culpable. La pista se cortó. Por ahora, lo que sabemos es que la mente maestra detrás del ataque al barco, quien quería eliminar a los testigos, probablemente sea una facción que opera en Luz de Luna.
En el barco había algo extremadamente importante, algo no solo de valor incalculable.
¡Sino que podía volver loco a cualquiera!
Juan, aunque era el prometido de Lourdes, y antes que nada, era subordinado de Vicente.
Transportar ese objeto

คลิกเพื่อคัดลอกลิงก์
ดาวน์โหลดแอป Webfic เพื่อปลดล็อกเนื้อหาที่น่าสนใจเพิ่มเติม
เปิดกล้องโทรศัพท์เพื่อสแกน หรือคัดลอกลิงก์แล้วเปิดในเบราว์เซอร์ของคุณ
เปิดกล้องโทรศัพท์เพื่อสแกน หรือคัดลอกลิงก์แล้วเปิดในเบราว์เซอร์ของคุณ