Capítulo 47
Pedro se quedó desconcertado; realmente no esperaba que Víctor regresara en ese momento.
Víctor pasó junto a Pedro y se acercó a la cama, su voz se suavizó un poco. —Abuelo, ya despertó.
—Mm.
Alonso tosió dos veces y su expresión se aclaró un poco. —Isa vino a verme, y ellos hacen tanto alboroto. ¿Quién puede mandar en esta casa ahora?
—Si quieren mandar en Casa Ramos, esperen a que el viejo muera primero.
Pedro palideció. —Padre, yo no quise decir eso...
Víctor calmó a Alonso con unas palabras y luego giró la cabeza con una expresión indiferente hacia la puerta donde estaban los otros. —El abuelo ha hablado, ¿todavía no se van?
...
Aunque a regañadientes, Pedro solo pudo llevarse a Belén de mala gana.
La habitación volvió a la calma.
Víctor, paciente, sacó una silla para sentarse. —Abuelo, ¿se siente mal en alguna parte? Puedo llamar a Miguel.
Alonso levantó débilmente la mano. —Conozco el estado de mi cuerpo; es una enfermedad vieja, llamarlo sería igual.
—Afortunadamente Isa llegó a

คลิกเพื่อคัดลอกลิงก์
ดาวน์โหลดแอป Webfic เพื่อปลดล็อกเนื้อหาที่น่าสนใจเพิ่มเติม
เปิดกล้องโทรศัพท์เพื่อสแกน หรือคัดลอกลิงก์แล้วเปิดในเบราว์เซอร์ของคุณ
เปิดกล้องโทรศัพท์เพื่อสแกน หรือคัดลอกลิงก์แล้วเปิดในเบราว์เซอร์ของคุณ