Capítulo 740

Enrique hizo que Alicia se tendiera en la cama y le quitó el abrigo que él le había colocado, pues este era tan grueso que, si se lo dejaba puesto, ella pronto estaría empapada de sudor, y no sería bueno que ella tuviera fiebre. Enrique decidió quitarle luego el delgado abrigo de ella. Alicia iba a dormir un buen rato. Después de que él le quitó el abrigo, pudo observar que tenía un suéter gris ajustado, el cual realzaba su torso perfecto y le confería un gran encanto femenino. Enrique apartó la mirada y la cubrió con la colcha. Dejó escapar un suspiro de alivio y notó que estaba sudando. Se volvió y tomó el termómetro para examinarla. Al hacerlo, advirtió que su fiebre había desaparecido. Sin embargo, era posible que la fiebre regresara en cualquier momento, así que él tenía que vigilarla constantemente. Además, había una enfermedad de la que muchas personas se habían contagiado, y él no podía permitir que ella también la contrajera. El viejo amo Litchi estaba internado en la Unidad d