Capítulo 11

Punto de vista de Percival Pasé por el cuarto de Regina y me detuve. Por alguna razón, tenía ganas de saber qué había hecho. Pensé en invitarla a cenar conmigo para que me contara de su día. No me cansaba de escucharla ni de verla. Sin embargo, primero tenía que relajarme un rato, así que fui directo a mi cuarto. Entré a mi vestidor y me quité el saco y el reloj. Justo cuando lo estaba guardando, noté que el estuche en la otra vitrina estaba vacío. Fruncí el ceño y me encontré con que, efectivamente, mi reloj más preciado no estaba. No soy para nada descuidado y me gusta tener todo en orden. Sin embargo, había estado tan estresado los últimos días que tal vez lo había puesto en otro lugar. Mientras me reprochaba mi descuido, comencé a buscarlo por el vestidor, sin éxito. Entré a mi cuarto y revisé en todos los cajones y hasta abajo de la cama, pero tampoco tuve suerte. De todas las cosas que podía perder, siempre había tenido cuidado de que no fuera ese reloj. Ni siquiera lo usaba, pue