Capítulo 315
María dijo: —Adrián es realmente afortunado de casarse contigo.
Sonreí levemente, pero no respondí.
¿Y acaso no soy yo también afortunada?
Cuando Alejandro me traicionó, encontré en Adrián a quien me curó y redimió.
—¿Cuánto tiempo tardarán en regresar? —María me preguntó de nuevo.
—No estoy segura. —No di un tiempo específico.
María suspiró: —Carmi, cuando regreses, ven a hablar conmigo; realmente tengo un peso en el corazón.
Pensando en cómo ella y Alejandro se habían enfrentado tanto, todo porque ella expulsó a Laura por mí, le prometí: —Está bien, cuando regrese, iré a verla a usted y a José.
—Está bien, también debes cuidarte allá afuera y prestar atención en un lugar desconocido. —María me aconsejó.
—Lo haré. —Respondí: —Y usted, no se enoje.
—Ay. —María suspiró profundamente.
La llamada terminó, y yo también exhale un gran suspiro.
Desde que me peleé con Alejandro, descubrí que hablar con María y José se ha vuelto más opresivo.
Guardé el teléfono, miré hacia donde estaban Adrián

คลิกเพื่อคัดลอกลิงก์
ดาวน์โหลดแอป Webfic เพื่อปลดล็อกเนื้อหาที่น่าสนใจเพิ่มเติม
เปิดกล้องโทรศัพท์เพื่อสแกน หรือคัดลอกลิงก์แล้วเปิดในเบราว์เซอร์ของคุณ
เปิดกล้องโทรศัพท์เพื่อสแกน หรือคัดลอกลิงก์แล้วเปิดในเบราว์เซอร์ของคุณ