Capítulo 143

Cuando Edward le dijo al señor Franks que tenía un almuerzo pendiente en la oficina, no le mentía. O al menos, no del todo. Su intención era aparecerse un momento para dejar encargado a Robert y después ir a un salón privado. Roses Appeal era un lugar diseñado expresamente para la gente que venía en busca de privacidad. Cada ambiente reservado estaba bien alejado de los demás y se accedía a ellos por caminerías embaldosadas, en cuyos bordes había jardineras con hermosas flores que brotaban como si fuera primavera. Era muy bonito, pero Edward no estaba de humor para apreciarlo. Tenía demasiadas cosas en la mente como para dejar espacio a algo más.  El local disponía de tres habitaciones privadas independientes, que no estaban al alcance de la gente común, ni siquiera teniendo el dinero para pagarlas, porque se requerían las conexiones para poder hacer una reservación. Solo las personas muy importantes podían acceder a ellas. Había un pequeño pabellón a un lado del pasillo, en la zona de