Capítulo 31

Se quedó de pie frente al mostrador durante varios minutos, pero nadie salió del ascensor a recibirla, como le habían prometido. La recepcionista la miraba disimuladamente de vez en cuando, pero los demás la contemplaban sin ningún pudor. Oyó a dos mujeres que susurraban entre ellas: "Nunca pensé que la vería vestida de forma tan corriente en la vida real. Parecía una profesional en el escenario". "Sí, estaba muy guapa con ese vestido, iba bien maquillada y tenía el pelo largo hasta la cintura", añadió la otra muchacha, intentando no mirar directamente a Alexia. "Bien, ya es suficiente, ¿y si se da cuenta de que estamos hablando de ella?", le advirtió la primera chica. "¿Y eso qué importa? No estamos diciendo nada malo ni inventando historias. Solo estamos admirando su belleza aunque esté usando otra ropa", argumentó la joven con expresión seria. "Tienes razón", le respondió la otra muchacha. Alexia se quitó las gafas y sonrió a las mujeres, quienes asintieron y se apresuraron a marcha