Capítulo 175
Sin embargo, apenas Alejandro se había levantado, Ana lo atrajo de vuelta.
—No te vayas...
Alejandro frunció el ceño y, mirando hacia abajo desde su altura, observó a Ana en la cama. —¿Estás realmente borracha o solo finges?
Ana abrió sus ojos empañados.
Intentaba enfocar claramente a la persona frente a ella.
Pero su visión era borrosa.
Parecía que la figura frente a ella estuviera velada por una capa de niebla, completamente indescifrable. Sin embargo, percibía un peligro desconocido, ese tipo de peligro que nunca había experimentado.
Un peligro desconocido...
Como si estuviera atrapada en un sueño.
Yacía en la cama, soñando que las personas más cercanas a ella la traicionaban, pero no podía hacer nada.
—Carlos...
Al escuchar este nombre, un frío brillo cruzó por los oscuros ojos de Alejandro.
¿Un desgraciado, y Ana aún pensaba en él?
—¡Vete!...
Entonces, lo que antes era un apretón fuerte, ahora se había soltado.
Los finos labios de Alejandro se comprimieron en una línea recta.
Ante

คลิกเพื่อคัดลอกลิงก์
ดาวน์โหลดแอป Webfic เพื่อปลดล็อกเนื้อหาที่น่าสนใจเพิ่มเติม
เปิดกล้องโทรศัพท์เพื่อสแกน หรือคัดลอกลิงก์แล้วเปิดในเบราว์เซอร์ของคุณ
เปิดกล้องโทรศัพท์เพื่อสแกน หรือคัดลอกลิงก์แล้วเปิดในเบราว์เซอร์ของคุณ