Capítulo 2018

Josefina miró al mayordomo Román y dijo: —Ya que este asunto fue encargado por el señor Bernardo para que tú lo manejaras, entonces déjalo en tus manos. No necesitas consultarme. Dicho esto, Josefina se marchó directamente. Ese día había salido con la intención de dar un paseo por el patio, pero al ser interrumpida de repente, se le había ido por completo el ánimo. Al verla alejarse, el mayordomo Román frunció el ceño, reflexionando. La mujer, al ver que quizás aún tenía una oportunidad, se apresuró a defenderse: —El señor Bernardo seguro que no querrá dejarme ir. Mayordomo Román, por favor, déjame ver al señor Bernardo. Te prometo que él decidirá dejarme quedar. Si logro quedarme, te deberé un gran favor. Lo que sea que me pidas en el futuro, lo haré. Al escuchar esto, el mayordomo Román se puso a pensar con más cuidado. —Está bien, entonces te daré esa oportunidad. Sin embargo... Una hora después. Cuando el mayordomo Román llevó a la mujer a ver al recién regresado Bernardo, apenas a