Capítulo 1594

Roberto era, precisamente, la persona ingenua y fácil de engañar que Aurora había encontrado. ¿Quién lo hubiera imaginado? En ese momento, lo más temido era el silencio suspendido en el aire. Alicia se levantó, miró a Roberto con gesto incómodo y dijo: —Ah, eras tú. Roberto la observó. —Je. Alicia: —... ¿Y ese "je" a qué venía? Por más que lo mirara, le resultaba realmente irritante. Sin embargo, delante de la niña no podía perder los estribos; al fin y al cabo, durante todo ese tiempo había sido gracias a él que Aurora había recibido cuidados. Alicia forzó una sonrisa que no alcanzó sus ojos. —Ah, entonces era usted. Hace un momento hubo un pequeño malentendido. El semblante de Roberto permaneció imperturbable mientras miraba a Aurora. —¿Dónde estabas hace un rato? La directora respondió: —Acababa de ir a hacerse unos exámenes. De momento no hay ningún problema grave, solo hay que prestar atención a la herida de la frente para evitar que le quede cicatriz. Al escuchar esas palabras, a