Capítulo 77 Hacer un escándalo

Nora seguía sentada en su asiento sin moverse, pero la puerta de vidrio de la oficina ya se había abierto automáticamente. La mujer que entró llevaba el cabello corto, un maquillaje impecable y una vestimenta elegante. Aunque no se podía decir que estuviera cubierta de joyas, el conjunto que llevaba debía costar fácilmente decenas de miles de dólares. A simple vista no aparentaba más de cuarenta años; su figura era proporcionada y estaba bien cuidada. Solo por su aspecto bastaba para estar a la altura de León. —¿Quién es Nora? La mujer, llevaba un bolso colgado del brazo, las manos en la cintura y tacones, se plantó en la entrada de la oficina con una actitud agresiva. Detrás de ella había un grupo de empleados: guardias de seguridad, recepcionistas, personal de contabilidad, recursos humanos... Había venido gritando a lo largo de todo el pasillo. Nadie la había detenido realmente; solo la seguían. Dentro de la oficina, todos fingían no oír. Enrique había sido despedido justo ayer, y e