Capítulo 12
Anderson volvió la vista y finalmente miró a la mujer a la cara,
la cual iba vestida con un cortavientos beige que la hacía ver fresca e inmaculada, pero había un aparente rastro de profunda tristeza en sus ojos, y los agudos sentidos del hombre se percataron de esto.
Entonces, con mirada sería, él respondió brevemente mientras asentía ligeramente con la cabeza:
"Sí, bebí un poco".
Clarissa forzó una sonrisa,
pues recordó que él era muy bueno para mentir, ya que el olor del alcohol era fuertísimo. ¿Cómo era posible que hubiese bebido solo un poco?
¡Obviamente, había bebido mucho!
Sin embargo, ella no sabía lo que había pasado y estaba demasiado avergonzada como para darle importancia, por lo que frunció los labios y no dijo nada.
En ese momento, David se dio la vuelta y preguntó con una sonrisa: "Señorita Chapman, ¿dónde vive?".
Ella le dio su dirección y el conductor la buscó en el mapa, y luego puso el auto en marcha.
Al interior de vehículo, nadie habló. Clarissa se limitó a poner s

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