Capítulo 159
La señora Sofía se sentó, atónita, repitiendo: —¿Cómo es posible? ¿Cómo es posible? ¡Esto no puede estar pasando... Este dinero...!
De repente, agarró fuertemente el cuello de la camisa de Héctor: —¡No importa qué! ¡Consigue más fondos, tenemos que comenzar este proyecto! Si no empezamos, se convertirá en una construcción inconclusa.
Héctor solo pudo responder: —Está bien, está bien... lo intentaré de nuevo.
Después de gritar y armar un gran alboroto, la señora Sofía salió furiosa de allí.
Apenas se subió al auto, recibió una llamada: —Señora Sofía, ¡esto es grave! ¡Un cliente vino a nuestra tienda y nos vendió un brazalete de oro de 130 gramos, diciendo que tenía pegamento dentro! ¡La Asociación de Defensa del Consumidor ya envió a alguien para investigarlo!
La señora Sofía sintió que su cabeza zumbaba y un gran malestar la invadió.
Gritó furiosa: —¿No pueden manejar esto ustedes? ¡Denle dinero al cliente, díganle que vamos a pagarle el triple! ¡No podemos permitir que esto se haga pú

คลิกเพื่อคัดลอกลิงก์
ดาวน์โหลดแอป Webfic เพื่อปลดล็อกเนื้อหาที่น่าสนใจเพิ่มเติม
เปิดกล้องโทรศัพท์เพื่อสแกน หรือคัดลอกลิงก์แล้วเปิดในเบราว์เซอร์ของคุณ
เปิดกล้องโทรศัพท์เพื่อสแกน หรือคัดลอกลิงก์แล้วเปิดในเบราว์เซอร์ของคุณ