Capítulo 223 No es como si pudiera disfrutarlo

Brendan sabía que solo cumplía por el bien de Ophelia, pero el resultado por sí solo era satisfactorio. Pidió una pastilla digestiva y la introdujo en la boca de Deirdre. Consultó el reloj de su muñeca. Era casi la hora. "Hora de irnos". Envolvió a Deirdre en un abrigo y la llevó afuera. Sam estaba a punto de seguirlos también, pero Brendan lo detuvo. "Hoy te quedarás en casa. Deirdre y yo tenemos asuntos privados que atender". La Doctora Ginger esperó a que los dos se marcharan antes de acercarse a Sam y apoyarse en el hombro del guardaespaldas. Tenía una sonrisa pícara en la cara. "¿Alguna vez lees la habitación, muchacho? ¿No te das cuenta de que ellos van a tener una cita?". "¿Una cita?". Sam frunció el ceño. "De ninguna manera". "¿Por qué no?". A diferencia de él, la Doctora Ginger sabía muy poco sobre la turbia historia de la pareja. Aun así, mientras sacudía la toalla de mano para limpiarla, señaló: "La relación del Señor Brighthall y la Señorita McKinnon puede ser, ejem,