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El Amor EternoEl Amor Eterno
Ayoko: Webfic

Capítulo 164

La ubicación que Zachary me había enviado era la entrada del aeropuerto. Cuando llegué, estaban estacionados varios coches caros. No se permitían estacionamientos privados en ese lugar. Las personas que lograron estacionar allí eran ricas o poderosas. Entre los coches, había un Mercedes-Benz negro con numero de matrícula ‘uno’. Ni siquiera tuve que hacer conjeturas, ese había sido el coche de Zachary. Él estaba esperando por mí en su coche. Estacioné mi coche en el estacionamiento como todos los demás. Luego bajé para ir a Zachary. Sin embargo, alguien me detuvo cuando acababa de llegar al lado de la puerta del Mercedes. Esta era una persona extremadamente repugnante “Caroline, ¿por qué estás aquí?”. Su voz era repugnante. Ella nunca había aprendido y mejorado de sus experiencias anteriores. No sabía a quién debería y a quién no debería provocar. Sin embargo, ella tuvo la audacia de ser arrogante. Después de todo, ella era la futura ama de la familia Yale. Ella también era la prometida de Dixon. Le di la espalda y le dije, “¿Qué tiene que ver esto contigo?”. Ni siquiera quise mirarla. Ella preguntó burlonamente. “¿Cómo está tu condición?”. Yo, “...” Realmente detestaba a la mujer detrás de mí, pero me dolió la cabeza cuando vi que ella no se rendía. Podría haber abierto la puerta del coche e irme, pero no quería que viera a Zachary. Me di la vuelta y estaba a punto de tomar represalias, pero me quedé atónita cuando vi al hombre a su lado. No tenía idea de por qué Dixon estaba aquí. Por supuesto, Dixon no fue el único. Aparte del viejo amo Lewis, todos los miembros de la familia Yale estaban aquí. Incluida la tía de Dixon, Madame Yale. Él debía estar allí para darles la bienvenida. Lo único que no sabía era si estaba allí para buscar a su tía, Madame Yale, o estaba allí a propósito para buscar a Wendy. Sin importar a quién hubiera sido, no era asunto mío. Wendy puso de manera deliberada sus manos en el brazo de Dixon cuando me vio sorprendida y se burló de mí. “Caroline, tuviste una aventura con Lance dos meses después de que causaras una escena en la iglesia. Incluso involucraste a la familia Schick de la Ciudad Tong. Aparte de eso, incluso besaste a Sean no hace mucho… Eres realmente una mujer coqueta”. Una vez sentí que Jennifer era tonta y Wendy había sido un poco mejor. En ese momento había sido al revés. Entrecerré los ojos y miré a Dixon. Él apartó directamente las manos de Wendy de sus brazos y me miró con calma. Parecía que no quería involucrarse en esta pelea entre nosotras. Anteriormente, él se hubiera puesto de mi lado. Él una vez me dijo que yo era su todo. Sin embargo, ahora, él era diferente. Había estado actuando como lo hacía hace dos meses. Hizo un trato con Cinque para que yo pudiera seguir viviendo. Lógicamente hablando, no debería haberme molestado por él porque tenía buenas intenciones. Sin embargo, lo que dijo acerca de que yo no podía tener hijos me dolió. Toda mi inferioridad y vergüenza cesaron después de que dijo que yo no podía tener hijos. Había dejado de rogarle a él que me llevara de regreso a casa. Tampoco quise evitar que se casara. Solo quería escapar de allí con todas mis fuerzas. ¡Por suerte había aparecido Zachary! Exhalé y sentí que no tenía sentido. Wendy se sintió avergonzada cuando Dixon le apartó la mano. Ella de repente dijo algo significativo. “Te deseo buena salud”. La miré. “¿Hay algo mal contigo?”. La cara de Wendy se puso pálida inmediatamente después de escuchar mis sencillas palabras. Le recordé con indiferencia. “No quiero perder tiempo siendo calculadora y explicando cosas a las que he respondido en Internet. Aparte de eso, ¿qué pasa si beso a Sean? Estoy divorciada y soltera. Puedo estar con quien quiera estar. Aparte de eso, ¿qué tiene que ver contigo la aventura entre Lance y yo? ¡Puedo aceptar estar con él o incluso puedo ir tras Dixon abiertamente! Porque estoy soltera en este momento. Puedo ir con quien yo quiera. Ciertamente puedo aceptar el afecto de cualquiera, incluido de mi ex marido, Dixon”. El rostro de Wendy se ensombreció y Dixon me miró. Sonreí y dije mientras lo miraba. “Lo que quise decir fue en caso tal eso ocurre. No volvería a involucrarme con Dixon. Después de todo, este hombre pertenece al pasado y no me permitiría vivir en el pasado”. Dixon me dijo fríamente. “Caroline, eso es suficiente”. Esta fue la primera oración que Dixon me decía en dos meses y pude ver claramente la ira en sus ojos. Le pregunté con una sonrisa, “Aw, ¿todavía estás enamorado de mí?”. Me burlé de él sin rodeos. “No puedo tener hijos, pero aún me amas, ¿verdad? Dixon, estoy parada frente a ti ahora mismo. ¿Te duele que no puedas atraparme?”. Dixon, “...” Los rostros de Wendy y Dixon se ensombrecieron. Madame Yale sonrió cálidamente a su lado y trató de suavizar la situación. “Señorita Shaw, no sé mucho sobre las relaciones entre los jóvenes, pero usted dijo que todo estaba en el pasado, y ahora Dixon es el prometido de Wendy. Estoy segura de que todos conocen sus límites y no harán cosas que lastimen a nadie”. Madame Yale hizo una pausa antes de hablar astutamente. “Los problemas de relación deben permanecer como problemas de relación y no deben afectar la paz entre la familia Shaw y la familia Yale”. Yo estaba en paz con la familia de Yale gracias al viejo amo Lewis. Cuando el viejo amo Lewis se retiró para estar detrás de escena, la familia Yale definitivamente sería mía. Este fue mi castigo para Wendy por ser desobediente. Sin embargo, este asunto tenía que discutirse a fondo. Yo dije con una sonrisa. “Por supuesto”. Relajé mi cuerpo y me apoyé contra el coche detrás de mí. Le recordé a Wendy con indiferencia, “Presidenta Yale sigue burlándose de mí primero cada vez que nos vemos. Incluso derramó una copa de vino sobre mí anteriormente. ¿Qué alegría le trae esto? ¿La cicatriz en su frente? Nunca sacó nada bueno de ningún encuentro que tuvimos. Si yo fuera usted, habría aprendido mi lugar hace mucho tiempo. Espero que Madame Yale la controle bien”. Había una cicatriz poco profunda en la frente de Wendy y debería ser muy difícil deshacerse de ella, al igual que la de mi cara. ¡Ella tuvo la culpa por ello! Wendy me miró enojada pero no pudo hacer nada porque Dixon y Madame Yale estaban allí. Madame Yale había dicho en tono de disculpa. “Lo siento, presidenta Shaw, definitivamente controlaré a Wendy”. No se fueron y los miré en silencio. Estaban avergonzados de haberse quedado parados aquí. Fue Madame Yale quien les pidió que se fueran. Cuando se dieron la vuelta, abrí rápidamente la puerta del coche. Rápidamente entré al coche y vi que Dixon se había volteado para echar un vistazo cuando cerré la puerta. Me encontré con su mirada la cual tenía una leve sonrisa, pero estaba molesto por dentro. ¿Había visto a Zachary? ¿Y qué si él veía a Zachary? Dixon no era un hombre que buscara peleas. Lo miré con una sonrisa y su rostro se puso pálido y oscuro. De repente movió los labios y preguntó sin hablar. “¿Cuál es tu relación con Zachary?”. Moví mis labios y respondí sin una voz. “¿Adivina?”. Rápidamente cerré la puerta del coche. Mi cuerpo sintió un escalofrío ya que era verano y el aire acondicionado del coche estaba funcionando a su máxima capacidad. Me di la vuelta y vi a Zachary, que bajó los ojos. Él tenía una laptop sobre las rodillas y parecía estar manejando algunas cosas. No me saludó cuando me vio entrar al coche, en cambio le ordenó al conductor con frialdad, “Vamos a Auger”. Auger era el edificio comercial más famoso de la Ciudad Wu. El conductor comenzó a conducir y hubo un silencio interminable después de eso. Zachary vio todo lo que pasó afuera del coche hace un momento, pero no me preguntó nada al respecto. Lo mejor de este hombre era que él no tenía curiosidad. Si esto hubiera sido en circunstancias normales, este hombre me habría consolado. No me importaba su frialdad. La razón principal por la que fui a buscarlo fue por Joshua. Sin embargo, él estaba ocupado con el trabajo en ese momento y era inconveniente para mí molestarlo. Me senté a su lado obedientemente. Cuando llegamos a Auger, él salió e hizo sus propias cosas mientras yo me sentaba en el coche y esperaba con paciencia. Él había estado ocupado hasta la noche. Lo esperé en el coche entre cuatro y cinco horas. Estuve mirando a Weibo durante esas horas, temiendo que Joshua hubiera hecho algo fuera de lo común. Por suerte, todo parecía muy tranquilo y pacifico. En realidad, no todo fue tranquilo y pacífico. Cuando Joshua usó el sitio web oficial de la Corporación Schick para volver a publicar esa publicación de Weibo, ya había instigado a la multitud a hacer burbujas rosas y a agruparnos a mí y a Zachary como una nueva pareja. En realidad, no tenía ninguna conexión con Zachary. Las conexiones a las que me refería eran de corte romántico. Justo cuando estaba melancólica, por la ventanilla del coche vi a Zachary salir del edificio. Su cuerpo estaba erguido y alto, mientras que sus pasos eran firmes y constantes. Parecía que me acababa de ver. Lo pensé y ¿fue por lo que me puse hoy? Aunque Zachary era un asceta, seguía siendo un hombre y era normal que se emocionara cuando conocía a una hermosa mujer. Incluso si esto no tuviera nada que ver con el amor y la relación. Así era como los hombres miraban a las mujeres. Él frunció el ceño y dijo. “La próxima vez, no uses ropa como esta”. Seguramente, lo que vestía le llamó la atención. Le pregunté inconscientemente, “¿Por qué?”. La fría voz de Zachary dijo, “Estás mostrando demasiado”. Yo, “...” Esta fue la primera vez que comentaba sobre mi ropa. ¿Hasta ahora había visto lo que yo llevaba puesto? ¿Cuánto tiempo él realmente me ignoró? Dejé caer la cabeza y miré la camiseta blanca sin mangas que mostraba mi cintura. Quería preguntarle qué hacía mi ropa para provocarlo, pero no me atrevía a discutir con él, así que me quedé callada. Me dejé caer en el asiento trasero, miré el paisaje afuera a través de la ventanilla del coche sin hablar. No mucho después, el conductor me había pedido la dirección de mi condominio. Le dije mi dirección y el conductor nos envió de regreso al condominio. Traje a Zachary a mi casa. Había pensado en cocinar porque no habíamos cenado, pero era mala cocinando. Pregunté a Zachary, “¿Qué quieres para cenar?”.

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