Capítulo 1376

Su cara se tornó sombría. Si Antonio lograba reunirse con el señor Marcos, sin duda se convertiría en la persona más confiable a su lado. Ángel había ocupado ese puesto durante tanto tiempo precisamente porque Marcos confiaba profundamente en él. De no ser así, no le habría encomendado el interrogatorio de Benjamín. Inhaló profundamente. No podía permitir que Antonio viera al señor Marcos. De inmediato ordenó a sus hombres investigar la situación y supo que Antonio se encontraba en ese momento cerca del muelle, a punto de partir rumbo al Palacio Presidencial. Ángel aún podía interceptarlo en el trayecto, así que, sin dudarlo, se subió al auto con sus hombres. Por otro lado, Antonio esperó a que Ángel saliera antes de llamar a Marcos. —Señor Marcos, ya tengo pistas del paradero de Lorena y Pedro. Quiero reunirme ahora mismo con usted para discutirlo. No me atreví a informar a nadie más. Los ojos de Marcos se llenaron de incredulidad, seguidos de una inmensa alegría. —¿Estás seguro? —Señ