Capítulo 1417

Detrás de ella estaba una mujer de mediana edad, de apariencia severa, llamada Clara. Beatriz la había recogido en Nubia cuando era un bebé y la había criado a su lado desde entonces, convirtiéndola en la persona en quien más confiaba. Además, Clara actuaba con una eficacia y determinación absolutas. Aunque Beatriz ya estaba ciega, aun así conocía todo lo que ocurría en el instituto. —Clara, ¿ya llegó esa chica? —Señora Beatriz, está por llegar. Beatriz sonrió levemente. Todo su cuerpo estaba tan marchito como la corteza de un árbol. Respiró hondo y hasta su palma temblaba levemente. —Esa gente dice que esta tecnología necesita por lo menos seis meses para estar completamente desarrollada y eso es lo que me queda de vida: seis meses. En este momento, aparece mi última nieta biológica, perdida en el exterior. Dime, ¿no parece que hasta el cielo está ayudándome? —Señora, la prueba de parentesco ya está en proceso. La cara de ella se llenó de una sonrisa. —Salvador no se equivoca al hacer