Capítulo 227

Paula seguía refutándolo. —No, en serio no es así, no fui yo, juro que no fui yo... —¡Este video debe ser falso! ¡Es una trampa que ustedes han armado! ¡No van a acusarme con un video falsificado! Paula se abalanzó hacia adelante y rompió el proyector que el periodista sostenía, estrellándolo contra el suelo. El aparato se destrozó, y la imagen proyectada en la pared blanca desapareció al instante. Nancy, al recuperarse, vio a Paula tan desamparada que sintió un dolor cortante en el corazón. Estuvo a punto de correr hacia ella para abrazarla, pero un ruido más fuerte se escuchó en la entrada. Rafael, furioso, reprendió a los guardias de seguridad: —¿Están todos ustedes muertos o qué? ¿Qué clase de lugar creen que es cualquier antro, que cualquier persona puede entrar? Los guardias no se atrevieron a responder. No podían detener a las personas que llegaban esta vez. Era el capitán José, quien llegó acompañado de más agentes. Al ver la expresión seria del capitán José,