Capítulo 426

Stella quitó la mano. "Me voy a casa", le dijo sin mirarlo, agarró su bolso y se levantó para marcharse. RK la sostuvo con fuerza contra la silla. Cogió un pañuelo y le limpió la comida que tenía en la comisura de los labios. Luego, le agarró la mano con firmeza y, sin darle opción de negarse, la arrastró hasta el coche. Entonces, aseguró las puertas y observó cómo Stella intentaba abrirlas sin éxito una y otra vez. Por fin, renunció a sus intentos y pateó la puerta enojada. "Déjame salir". "Te dejaré ir cuando termine de hablar". RK sostuvo a Stella y le abrochó el cinturón de seguridad. Después, emprendió la marcha través de la interminable corriente de tráfico. Stella se limitó a cerrar los ojos como si estuviera dormida para no tener que mirarlo. Para relajar el ambiente, RK encendió el radio y una lista de canciones tranquilas llenaron todos los rincones del coche. RK se estacionó junto a la playa. Stella sintió que el coche se había detenido, así que abrió los ojos poco a poc