Capítulo 74

—Créame, presidenta María, con mi experiencia en los negocios, seguir mi camino no será un problema. —dijo Carmen. —Y, por favor, créame, cada industria necesita un referente, cada empresa necesita un producto estrella. Si perfeccionamos ese producto estrella, podremos mantenernos invictos. Nuestro producto estrella es único, ¡y lo desarrollamos al máximo! María respondió sarcásticamente, sin mostrar debilidad alguna. Especialmente con Alejandro a su lado, se sentía aún más animada. Carmen, claramente molesta, mostraba su enojo con un ligero temblor en el pecho. —Presidenta María, no estoy tratando de discutir contigo. Mi consejo no lleva ningún sentimiento personal; está completamente basado en los intereses de la empresa. Ella recalcó. —¡Yo también! —respondió María directamente, mirando a Carmen a los ojos sin un ápice de debilidad. ... Alejandro observaba el intenso choque verbal y visual entre ambas; cualquiera podía percibir el denso ambiente de discusión. Comenzaron a discutir d