Capítulo 427

La recepcionista se sonrojó y subconscientemente bajó la cabeza. "¿En qué puedo ayudarlo, señor?". El rostro de Julian permaneció inexpresivo, pero la indiferencia en sus ojos aumentó. Retrocedió un poco, poniendo más distancia entre los dos mientras decía, "Estoy buscando a alguien". "Lo siento, señor, pero no puedo ayudarlo. No podemos revelar el paradero de los huéspedes que entran. Si se trata de su amigo, tal vez podría llamar a esa persona y preguntarle personalmente en su lugar". Si Diana respondiera a su llamada, Julian no tendría que perseguirla hasta aquí, ¿cierto? Le brillaron los ojos de fastidio y espetó, "¿Dónde está tu gerente? Pídele que venga a verme". Viendo lo seguro y bien vestido que estaba Julian, la recepcionista no se atrevió a retrasarlo y llamó inmediatamente a su gerente. Pronto, Julian fue invitado al pasillo donde se encontraba la habitación privada de Diana. "No tienen que seguirme", dijo Julian al gerente y al grupo de personas que iban detrás de